miércoles, 6 de mayo de 2009

Puntualidad Extrema.



A ver a ver... De vuelta al trabajo de escritor (si esto es un trabajo, a mi me saldrán plumas) En fin. Hace algunas semanas que no escribo. Pero creo que ya era tiempo. Escucho Snow Patrol (gracias Elenita por enseñarme su música, simplemente me encanta)
Bueno. Hoy mi devocional trato sobre Gálatas 4:1-7, y estaba titulado: "Justo en el momento preciso" Y habla de la puntualidad. Bueno, al menos esa es la introducción. Y yo pensé que hablaría de la ética cristiana de cara a la puntualidad. Porque dice que nos cuesta ser puntuales, lo cual es una gran verdad, a pesar de que a mi me guste ser puntual.
Pero de un momento a otro da un giro inesperado. Habla de la puntualidad de Dios: "Pero he aquí la buena noticia: ¡Dios siempre es puntual! Al hablar acerca de la llegada de Jesús, Pablo dijo: Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su hijo El Salvador largamente esperado y prometido llegó justo en el momento preciso.
La llegada de Jesús durante la Pax Romana (la paz de Roma) fue el momento perfecto. El mundo entonces conocido estaba unido por un solo idioma comercial. Una red de rutas comerciales globales brindaban acceso abierto a todo el mundo. Todo esto garantizó que el Evangelio pudiera avanzar rápidamente en una sola lengua. Sin visados. Sin fronteras impenetrables. Tan sólo el acceso sin obstáculos para ayudar a difundir la noticia del Salvador cuya crucifixión cumplió con la profecía del Cordero que sería inmolado por nuestros pecados (Isaías 53). ¡Todo en el tiempo perfecto de Dios!

Todo esto debe recordarnos que el Señor también sabe qué momento es el mejor para nosotros. Si estás esperando la respuesta a alguna oración o el cumplimiento de alguna de Sus promesas, no te rindas. Si piensas que Él te ha olvidado, reconsidéralo. Cuando el cumplimiento del tiempo sea el indicado para ti, Él aparecerá —¡y quedarás asombrado ante lo brillante de Su plan! —JMS"

Y aquí vuelvo a entrar yo.
Muchas veces nos hacemos preguntas sobre nuestro futuro. Mas aún cuando hemos depositado nuestra confianza en Jesucristo, porque de ahí en adelante nosotros ya no dirigimos nuestras vidas, sino que nos basamos en Su voluntad para tomar nuestras decisiones y guiar nuestras vidas. Ya no son "nuestras" decisiones sino que ahora son "SUS" decisiones

Y el cristiano, como el que no lo es, afronta decisiones trascendentales, y no tan trascendentales en su vida. Decisiones como que estudiará cuando termine el colegio, en que se especializará, que quiere conseguir con su vida, con quien se casará, donde vivirá, donde trabajará, si debe cambiar o no de casa, trabajo, pareja, planeta, auto, cama, vajilla, alfombra, desodorante, empleados, jefes, corbata, etc., etc. etc.. Y a veces, siendo cristianos, no sabemos que decidir, y pedimos la dirección de Dios. Y Dios no responde. Y empezamos a dudar sobre su amor, su interés, su fidelidad, sus promesas, y así va acumulándose la desconfianza en nuestros corazones, y la decepción.
Eso me pasó hace algún tiempo. Pero comprendí una cosa, que en ese tiempo solo el me pudo haber mostrado: Si Él calla, no es porque no le interesemos. No es porque seamos poco importantes. Él nos ama. Demostró su amor en dar a su Hijo por nosotros, demostró su amor en darlo en el momento perfecto, demostró su fidelidad en su puntualidad, demostró su puntualidad en su poder. Y demostró su poder en Su fidelidad.
Cuando nada estaba bien, cuando mi vida parecía un desierto desolado, cuando no estaba seguro ni de mi carrera, ni de mi fe, ni de que existiera ese Dios Padre, amoroso, misericordioso, justo, ese del que me enseñaron por tantos años; cuando el solo callaba, el habló. El fue fiel una vez más, y respondió. Me mostró un cristianismo simple y personal: Creer porque yo creía, por así decirlo, algo así como hacerlo porque si, porque funciona, porque existe, porque pasa. Seguirlo porque el me buscó primero. Y serle fiel porque el respetaba mi libertad.
Ahora bien, la libertad en Él, es seguir lo que Él dice. Y respecto a las preguntas anteriores, y las demás que nosotros pudiéramos tener, y formular, bueno, simplemente Él tiene las respuestas. Y cuando hacía mi devocional me vino otro versículo a la mente, uno que leí hace un tiempo en Habacuc 2, 3-4:
“Todavía no se ha cumplido el plazo señalado, pero se aproxima y no miente. Aunque parezca que tarda, espérala, porque vendrá con seguridad y no se retrasará... pero el justo vivirá por su fe"
Así que, si tienes cosas pendientes que decidir, y confías en Cristo, ¿por qué desesperarse? Dios nos hizo a todos con un propósito. No creó basura. Llamó a su creación como algo muy bueno, así que el se interesa por nosotros, ¡y es un padre amoroso!
Ahora bien, estuve durante la tarde preguntando vía facebook a la gente que debería escribir, sobre que debería tratar este post, porque hace un tiempo que no escribía. Ella (Katherine Urbano) me dijo que escribiera sobre: sueños, realizables o no? desde tu perspectiva y de tus amistades. Ok. No tocaré este tema del todo, porque es bastante interactivo de hecho. Pero si hablaré de lo que es tener éxito, un poco. Y me limitaré a lo que sería, según mi opinión, lo que es tener éxito para un cristiano, seguidor de Cristo, hijo de Dios, nacido de nuevo. Y esto es simplemente Buscar el Reino de Dios y su justicia y todas las demás cosas serán añadidas (Mateo 6.33) Ahora bien, ¿Qué es lo que quiere decir esto? Pues que lo busquemos, obviamente, lo que implica estudiar Su palabra, ponerla en práctica, regir nuestra vida en base a ella, en todo aspecto de nuestra vida. Bueno.
En resumen y buen romance, lo que tenga que venir vendrá cuando deba venir, trabajo carro, casa, pareja, hijos, ministerio, y todo lo que conlleva eso. Buscar conocerlo, y el mostrará lo que deba venir a su tiempo y según lo que Él haya prometido a cada uno.
Ese es uno de mis mas grandes conflictos, porque necesito con urgencia saber que propósitos quiero alcanzar en mi vida, y para eso necesito saber que es lo que Dios quiere de mi vida, pero hasta ahora no contesta; parece como si el me dijera: "No es tu problema aún, tu por ahora enfócate en lo que tienes que hacer ahora, estudiar administración, y aprender de mi Palabra, y lo demás se te mostrará luego" Y bueno, una vez mas Dios es Dios. Y Dios muestra en eso que me conoce: Sabe que yo soy de soñar despierto mucho, que si me gusta una chica, ya me imagino casándome (lo que implica imaginarme el tiempo de enamorados, y un largo etcétera), si tengo trabajo me imagino ganando algo por ser el mejor, y así sucesivamente. Y nunca es como yo lo imagino. Al menos nunca es precisamente como lo imagino.
Volviendo al tema del éxito, creo que se resume en hacer lo que debamos de hacer, y hacerlo de la mejor manera posible, poniéndole el mayor de los empeños, y reconociendo que Dios obra en las cosas grandes y complejas como en las pequeñas y simples, y que el premia el esfuerzo.
Fin de ese tema.

Ahora bien. Seguí consultando, y me encontré a mi amiga Hannita (si, así con cariño)y bueno, estuvimos hablando de el día (hoy día, es decir.)

Hoy desperté inusualmente temprano, aunque mucho que despierten normalmente a las 6 dirán más bien que fue tarde. Fui a la universidad a terminar con un trámite que tenía avanzado, matricularme. Simplemente debía llegar, subir al tercer piso, que un asesor me firmara la ficha que ya había llenado, que el director de escuela me la firmara también, me pusiera la turnos, y de ahí ir a informática a pasar la matricula al sistema. Terminaba eso en menos de una hora, y asunto arreglado. Podía ir a trabajar feliz y tranquilo.
Pero no salió como esperaba. Simplemente al legar, poco antes de las 8:30am, había una cola de mas de 50 personas, me dieron un ticket y me obligaron a esperar por un trámite que ya había hecho, al subir, promediando las 10am,(!) puede matricularme pero nuevamente tuve que hacer cola para el sistema, y este estaba medio defectuoso, y demoraban, y estaban haciendo pasar a los que llegaron antes que yo, porque tenían un ticket anterior, abajo. Es bueno precisar que tiene un tiempo para escribir en su ficha los cursos que quieren llevar, sus datos, su firma, y demás, que algunos se equivocan y deben escribir todo de nuevo, Y no era justo que esos que se demoraron fueran antes que yo, además ya eran las 11 de la mañana y necesitaba acabar para ir a trabajar.
Bueno, luego de algunos altercados, y vociferos de mi parte y del de algunos compañeros, mal llamados asesores, me hicieron caos y pude entrar y hacer mi trámite. Acabé a golpe de las 11:40am, y al llamar a mi compañero me dijo oque mañana nomás que hoy no podríamos trabajar, felizmente.
Y mi cólera disminuyó bastante, a pesar de estar con ropa formal (pantalón de vestir, zapatos, camisa y corbata) y que estuviera haciendo un sol asesino.

Bueno. Con Hannita notamos que uno debe ver el lado bueno de las cosas, y en que "Todo nos ayuda a bien"(Rom. 8:28... jojolete me acuerdo!)

Y bueno, creo que en el día fregado, agobiante, y molesto que tuve (ok, tan malo no fue, he tenido días peores), peor en los días que no salen como queremos, en los que nos invade (o simplemente sentimos una gran cantidad, no necesariamente somos invadidos) la depresión, la frustración, las preguntas, los malentendidos, las situaciones embarazosas, la tristeza, se nos va la esperanza, y nuestro día parece gris, podemos ver, muy posiblemente, si abrimos bien los ojos, si vemos un poquito a nuestro alrededor, que al final de todo, la cosas no son tan malas. Por ejemplo, acabé lo de las matrículas, y se me acercó el jefe de asesores a pedirme mi opinión sobre como se llevaba a cabo el sistema, me tomó en cuenta, y eso es algo bueno. Mis amigos me dijeron bajando para ira jugar a las cabinas con ellos, una amiga me saludó con una sonrisa, me encontré con Hanna en el Messenger (Hanna me cae muy bien) y he podido hacer un post inusualmente mas largo, y quizá mas rico gracias a lo que me pasó. Puedo estar triste porque no salen las cosas, y aun si estuviera solo, si no tuviera nadie que me recordara que le levanto el ánimo o que puedo ayudarle (gracias a ustedes que me dejan hacerlo) aún tengo la certeza de que tengo un Dios que está conmigo, y que provee todo lo necesario para que yo sea bendecido y dirigido, y eso me da felicidad. Cuando conoces de Cristo, nada te falta. Aun teniendo defectos y carencias, aun faltándote cosas esenciales el suple tus necesidades, tanto físicas como mentales y emocionales.

El es garantía de que al final del día, todo saldrá bien (No hablo necesariamente de un día cronológico)

Bueno. No sé como cerrar este post. Así que diré simplemente que confiemos. Y este es un recordatorio para mi mismo, de que siempre la solución a todos los problemas, esta ligada estrechamente a Dios y a su voluntad. Y digo que es un recordatorio, así como es un recordatorio todo lo que hasta hoy escribo, un recordatorio de ustedes para mí, de lo que Dios hace, de lo que Él muestra. Y sé que ustedes, en el momento adecuado me harán recuerdo de lo que está escrito aquí.

Creo que el post no es muy genial ni mucho menos, pero lo que contiene es útil e importante. Eso es lo que cuenta.